viernes, 27 de marzo de 2009

CON LA IGLESIA HEMOS TOPADO


La caza de Zapatero ha comenzado, la derecha española encarnada por el PP y secundada de cerca por sus medios (COPE, El Mundo, etc.) han decidido que es el momento de asaltar el poder, nos queda poco para la reedición del “váyase Sr. González” que hizo famoso Aznar en los 90.
Y la iglesia. Muda durante 8 años de gobierno de derecha entre 1996 y 2004 ahora se vuelve a acordar de defender la vida, de proteger al no nacido.

Vamos a refrescarles la memoria, que cuando quieren es flaca. Desde hace más de 20 años en España el aborto es prácticamente libre, tenemos que reconocerlo aunque no nos guste. Una vez que se incluyó el supuesto de poder abortar en caso de problema psicológico para la madre en este país puede interrumpir el embarazo cualquier mujer y en cualquier fase del embarazo. Basta con ir a una clínica privada que practique abortos, y que un médico y un psicólogo de la propia clínica privada confirmen que existe el conflicto psicológico de la embarazada. Qué van a decir ellos, es parte de su trabajo / negocio.
Y la iglesia católica callada durante años, en 8 años de gobierno de Aznar ni una palabra sobre el tema. Pero ahora gobierna el PSOE. Ya en la pasada legislatura sacaron a la gente a la calle para protestar, que si la familia se rompe, que si dónde vamos a ir a parar, el catastrofismo de siempre. El gobierno socialista está intentando impulsar una nueva Ley del Aborto mucho más garantista que la anterior, una ley de plazos, similar a la que está vigente en la mayoría de los países de nuestro entorno, que efectivamente le confiere a la mujer la libertad de decidir sobre su embarazo en las primeras semanas, pero que una vez transcurridas estas protege mucho más al no nacido, y no le deja al criterio de clínicas privadas que obtienen muchos ingresos con los abortos.

Pero eso a la iglesia en realidad le da lo mismo. La cuestión es desgastar al gobierno socialista, por lo que sea y al precio que sea. A la iglesia solo le importa mantener sus cuotas de poder, que ve más protegidas con los gobiernos de derecha, seguramente porque se acuerda de los tiempos de Franco, y no anda muy desencaminada con los actuales peperos.

Pero qué podemos esperar de una institución cuyo máximo dirigente, el Papa, se atreve a decir que el preservativo no es útil en la lucha contra el SIDA en su visita a África, el continente más pobre y azotado por esta terrible enfermedad. Así le va a la iglesia, cada vez más dogmática y lejana de la gente y sus problemas.

Quiero recordarles a la iglesia y sus acólitos de derecha que los gobiernos socialistas han impulsado leyes en España como la del divorcio, el aborto, los matrimonios homosexuales, y eso no implica que todos nos tengamos que divorciar, ni que todas las mujeres tengan que abortar, ni que todos nos tengamos que casar con personas de nuestro mismo sexo. Simplemente han sido leyes que nos han dado más derechos y nos han hecho más libres. A ellos también.

Hace poco se celebraron los 400 años de la obra cumbre de Cervantes, en uno de sus pasajes aparece la santa inquisición y Don Quijote le comenta a Sancho: “Sancho amigo, con la iglesia hemos topado”. Parece que fue ayer.

F.M.G.

lunes, 23 de marzo de 2009

LA DERECHA NUNCA CAMBIA

Hay cosas que nunca cambian. Aunque uno es bastante joven ha estudiado algo de Historia de España, y sobre todo ha escuchado a los mayores y sabe como se hacían las cosas en el pasado.
Las concesiones en la época de la dictadura eran “transparentes”, lo eran tanto que siempre se les daba a los mismos, a los adeptos al régimen. Que se iba a abrir una gasolinera o se iba a hacer una obra o había un servicio que adjudicar y le interesaba al cacique de turno camisa azul, pues para él. Y no protestaba nadie, primero porque se la jugaban, y segundo porque la gente llegó a verlo como algo normal, los franquistas eran los que tenían todos los beneficios y negocios, los demás a callar.
Lo mismo ocurría con los puestos de trabajo. Me ha encantado leer la biografía de nuestro anterior presidente, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, cómo recuerda a su padre, hombre de izquierda, depurado por el régimen franquista, lo cual le impedía trabajar dado de alta, siempre en precario por el hecho de no pasar por el aro franquista.

Han pasado muchos años, y sin embargo hay cosas que nunca cambian. Si se repasa qué personas son contratadas por el Ayuntamiento de Moraleja, las personas a las que se les sube el sueldo, las personas que sacan las oposiciones, todas tienen en común lo mismo, su apoyo incondicional al equipo de gobierno de derecha de este Ayuntamiento.
Y qué decir de lo que ha ocurrido con las normas subsidiarias, en las que se han eliminado los retranqueos de calles que, casualidades de la vida, benefician a diez familias fáciles de reconocer por su ideología de derecha y muy cercanas a los dirigentes de nuestro consistorio. Y cuándo le preguntamos a los ediles de derecha nos dicen que es que quedan mejor las calles así, más estrechitas. Alucinante.

Eso sí, aunque a la gente de derecha no le gusta hay algo que ha cambiado, al menos podemos protestar, hacernos oír y denunciar todas estas arbitrariedades e irregularidades. Y no nos vamos a callar, por suerte no pueden enviarnos a la policía para que les dejemos hacer lo que quieran y pasar por encima de quien sea.
Aunque les gustaría.
F.M.G